Libre Albedrío o Destino
Creo firmemente en el libre albedrío. Aunque he conocido a algunas personas que prefieren pensar que su vida está digitada por un Ser Superior o el Destino , amparándose en frases como: “Era / es la voluntad de Dios”.
La mayoría de la gente vive la vida como si su camino estuviera fijado por algo superior, llámese Dios, Alá o cualquier otro maestro y tiene demasiado miedo de explorar cualquier otra opción. Las personas que se dan cuenta que poseen el don del libre albedrío tienen la posibilidad de luchar por sus sueños y deseos, tienen la posibilidad de acertar o equivocarse bajo su propia voluntad. Nosotros comandamos nuestras vidas.
Si lo piensas bien, nuestras familias, nuestros amigos, nuestro entorno social, todos pueden condicionar nuestras vidas. Cuando damos un paso fuera de “lo que supuestamente corresponde”, son rápidos para tratar de frenarnos. Lo que sigue es por lo general tan desagradable que tenemos miedo de seguir nuestra propia intuición. Pero hay algunas personas que simplemente hacen caso omiso a lo que otros piensan o sienten y se aferran a su propio destino. Ellos simplemente lo toman. Y lo hacen con ninguna otra prueba, más que la confianza en sí mismo, jugándose todo en el intento.
Cito a Jawaharlal Nehru (primer ministro indio, 1889-1964): “La vida es como un juego de cartas. La mano que se da es determinismo; la forma de jugar es el libre albedrío”. Existen filósofos que discuten si incluso hay tal cosa como el verdadero libre albedrío ya que todos estamos sujetos a las relaciones causales y actos aleatorios no premeditados y por lo tanto, no elegidos libremente. Sin embargo, creo que la teoría de que el libre albedrío y el determinismo pueden coexistir. Aunque los deterministas dicen que nuestras vidas dependen de nuestra biología (la naturaleza), medio ambiente (crianza) y una serie de otros factores predeterminados. Aún así, todo lo que tenemos, predeterminado o no, tenemos la opción de trabajar en ello o contra ello, o con alguna combinación ambos. Nos encantan las historias de mendigo a millonario porque ponen de manifiesto cómo la propia voluntad de una persona puede subir y triunfar sobre el peso de las condiciones deterministas negativas.
Mi propia experiencia de vida ha puesto en evidencia que si bien tengo opciones, no soy omnipotente o ilimitada. Entiendo que hay algunas cosas que “simplemente ocurren”, pero lo que Nehru está diciendo es que nuestra forma de responder, a cómo elegimos nuestro próximo movimiento, es algo que solo controlamos a último momento. Si bien no somos propensos a elegir en contra de nuestro propio cableado del cerebro ni nuestras experiencias vividas, a veces lo hacemos. Y creo que esos momentos son cuando nuestra intuición es tan fuerte que en realidad siento que es algo que estamos “destinados” a hacer, aunque parezca irónico.
De todos modos me gusta pensar que somos artífices de nuestro propio destino, decidiendo y optando, nos equivoquemos o no. Es verdad que algunas vidas tienen más suerte que otras pero creo que luchando podemos realizar cambios importantes para avanzar y crecer tanto intelectual como espiritualmente.